VENTILACIÓN Y REFRIGERACIÓN

¿Por qué un PC puede necesitar refrigeración adicional?

Mantener refrigerado un PC y que sus componentes trabajen a una temperatura óptima hará que tanto el equipo como los componentes duren más y que se pueda sacar más rendimiento de ellos. La refrigeración es algo que a veces pasamos por alto, pero que marcará la diferencia a la hora de conseguir que nuestro equipo rinda de manera eficiente.

Se puede decir que hay tres tipos de elementos de refrigeración que permiten mantener controlada la temperatura de un ordenador:

• Refrigeración pasiva. Son los disipadores que llevan integrados algunos de los componentes del equipo. El funcionamiento es sencillo ya que el calor del componente es transmitido directamente al disipador.
• Ventilación activa. La temperatura se mantiene controlada usando ventiladores que ayudan a refrigerar el interior de la caja del PC. El aire que calientan los diferentes componentes cuando están en funcionamiento, se saca del interior de la torre gracias al movimiento del ventilador. Por ejemplo, en el caso de querer refrigerar un procesador, se suelen usar ventiladores para complementar el trabajo de los disipadores de refrigeración pasiva, así el calor del procesador es transmitido al disipador y el ventilador se encarga de remover el calor que desprende el disipador.
• Refrigeración líquida. Este método se usa cuando el equipo tiene instalados componentes que requieren un importante control de la temperatura para ofrecer el máximo rendimiento. Es un sistema más eficiente que los anteriores y apenas hace ruido. Su funcionamiento se basa en un circuito con distintos elementos que ayudan a controlar la temperatura del equipo. Por dentro de este circuito, el agua o el líquido refrigerante va desde el componente hasta el radiador. El radiador se encarga de mantener la temperatura controlada en el interior del kit de refrigeración líquida.

Cómo elegir la mejor refrigeración para un PC

Lo primero que hay tener claro es el tipo de equipo que tenemos y el uso que le vamos a dar. Si es para un uso normal, no vamos a realizar overclocking o nuestro equipo no es muy potente, será suficiente con los ventiladores que suele traer la torre y el ventilador de CPU que trae el procesador. El procesador es el elemento que más calor genera y el interior de la torre necesita tener un flujo constante de aire para mantener el resto de componentes a una temperatura controlada. El procesador y la torre serán los componentes en los centrar los elementos de refrigeración.

La medida más simple es substituir el ventilador básico del procesador por uno más potente, o si lo creemos necesario por refrigeración líquida. La refrigeración líquida está recomendada para los procesadores más potentes o si se quiere sacar el máximo rendimiento sin fundir el chip (por ejemplo haciendo overclocking).

La caja del PC tiene que estar bien refrigerada y por eso si dentro van a convivir elementos que generan gran cantidad de calor es necesario añadir ventiladores adicionales para conseguir una circulación del aire óptima. Si el equipo se monta con componentes y otros elementos más potentes o que consumen más, se hace necesario utilizar refrigeración específica. Tenemos ventilación específica para elementos concretos como son la RAM o la tarjeta gráfica, elementos de refrigeración que permiten mantener la temperatura de estos componentes controlada.

Otro factor a tener en cuenta para refrigerar un equipo son las condiciones en las que va a operar. Por ejemplo, si el ordenador realiza funciones sencillas de gestión, a priori no necesitaría refrigeración adicional; pero si lo hace en un entorno en el que la temperatura es elevada, sería aconsejable dotar al equipo de ventilación adicional para que funcione y rinda sin problemas de temperatura. De este modo conseguiríamos aumentar la vida útil del equipo y su eficiencia.

Elegir una buena refrigeración para un PC es algo básico porque permite sacar el mejor rendimiento del sistema y a la vez alargar la vida de sus componentes. Por eso te recomendamos que tengas en cuenta el uso que le darás a tu equipo y apuestes por una refrigeración de calidad en cada caso. Será una inversión inicial pero que a la larga hará que tu equipo dure y rinda más tiempo.